La manada(7)

Dedico este capitulo a mi mejor amiga R.A.Para vos amiga,se cuanto te gusta la manada...

-Te extrañe...

Ya había pasado un día desde que Jake se había ido.

En esas horas estuve nerviosa, Tan alto era el grado de nerviosismo

que mi madre me sugirió que lo llamara.

Pero yo me había negado, Jake tenía que estar con la manada,

planear, coordinar, proteger.

Su tribu, su manada, su familia lo necesitaba.

Estaba en mi cuarto cuando lo escuche.

La ventana de mi cuarto estaba abierta y, tal era mi desesperación,

salte hacia afuera por ella.

Corrí hacia el, que al verme sonrió y abrió los brazos.

Salte sobre Jake, rodee su cuello con mis brazos, su cintura con mis

piernas y recosté la cabeza contra su pecho.

El me abrazo y se quedo quieto.

La lluvia caía muy fuerte y nos empapaba a los dos, pero eso

no importaba, tenia su calor, lo tenia a el.

-Yo también te extrañe, Ness.-suspiro-No sabes cuanto.

Levante la cara y lo mire.

Sonreía y su pelo chorreaba agua.

Me estire para alcanzar sus labios.

El se percato de mi intención y se inclino, su cuerpo bloqueo el agua.

Aunque el agua importo muy poco cuando sentí sus labios.

-¿Y que han planeado?-le pregunto Bella a Jake.

Estábamos dentro de mi casa, sentados los cuatro en la sala.

-Hacer turnos dobles-respondió Jake-Mas protección para el pueblo.

Quise decir algo, pero no lo hice.

Jacob me rodeo con el brazo y me sonrió.

-Jake ¿Podemos ir a ver a Luna?-extrañaba esa bebe.

-Si, a Rachel le va encantar verte.

Luna era la hija de Rachel y Paúl era una bebe hermosa y pequeña.

Le tenía una adoración muy grande, igual que Jacob.

Esa bebe era nuestra sobrina.

En mi había despertado un sentimiento nuevo, nunca había tocado un bebe.

Al principio a Paúl le preocupaba que yo estuviera cerca de su hija, pero

yo nunca le aria daño.

Paúl había cambiado mucho desde la llagada de Luna, ahora era un hombre

maduro, no ese bromista insoportable.

A el resto de la manada le enfermaba, ya que los sermoneaba sobre

“el buen comportamiento” y “ser maduros”, Había  sido un cambio

muy grande en el ser padre.

Rachel estaba feliz con su bebe, aunque un poco preocupada.

Tenia miedo de no saber que hacer, pero cuando la bebe nació

esos miedos se fueron.

Billy estaba embobecido con su nieta, pasaba con ella y no podía

ocultar cuanto le encantaba.

Jacob la miraba como si fuera un tesoro, le caía baba por su

sobrina.

El resto de la manada estaba igual que Jake: babeaba.

Ninguno se había imprimado de ella, pero la miraban con unos ojos...

Para ellos, como para mi, esto era nuevo.

Aunque ya hubieran tenido un bebe en la manada, Luna era la favorita.

Rachel decía que era por que era nena.

El otro bebe era de Sam y Emily.

El pequeño Dean, de cuatro años, había nacido diez meses después de su boda.

Muchas cosas habían pasado con la manada.

Las dos manadas se habían unido y Jacob era el Alfa. Sam, tras el nacimiento

de su hijo, le había cedido el puesto, ya que quería pasar mas tiempo con su

familia.

Jake , aunque no lo admitiera mucho ,le había encontrado buen sabor a ser Alfa.

Leah vivía en Ports Ángeles, tenía un trabajo, iba a yoga y venia a veces.

Seth estaba en la universidad, estudiaba medicina.

Sue no sabia si iba a poder mandarlo, hasta que Edward dijo que el le pagaría

los estudios.

Muchos, entre ellos Seth, se opusieron, pero al final Edward y la manada ayudaban

a pagar la universidad.

Leah le mandaba dinero para sus gastos personales.

Así que Seth estaba estudiando para ser doctor.

Quil adoraba a su Claire, la cual ya tenia ocho años.

Jared y Kim seguían de novios.

Embry todavía no se imprimaba, aunque de vez en cuando salia con

alguna chica.

Collin y Brady eran los mejores amigos, tampoco se había imprimado,

aunque a ellos no les importaba.

Lo que no había cambiado era el sentimiento de familia, por que

la manada seguía siendo una familia.

Solo que yo era parte de ella.